El crecimiento global de la demanda en internet ha provocado el desarrollo de elementos capaces de almacenar la información esencial de nuestra empresa en servidores de alojamiento web. Nos referimos, naturalmente, a la nube y a las copias de respaldo. Estos dispositivos de copia de seguridad y recuperación ante desastres se utilizan para preservar nuestros datos en caso de una incidencia grave.
El “cloud backup” o backup en la nube nos permite acceder a ellos de una forma segura en cualquier momento, evitando pérdidas financieras. Es, sin duda, uno de los aspectos fundamentales de la seguridad TI. Se espera que el mercado crezca en los próximos años debido a la gran demanda de estos dispositivos en las pequeñas y medianas empresas.
Factores del crecimiento de los servicios en la nube
Uno de los factores que han incidido en el crecimiento de los dispositivos de copia de seguridad y recuperación ante desastres es el aumento del delito cibernético. Hablamos de infracciones como la suplantación de identidad o la estafa financiera, entre otros muchos. En este sentido las soluciones en la nube de backup aportan importantes mejoras en la seguridad TI respecto a otros soportes tradicionales de almacenamiento.
Otro de los factores a considerar se refiere a las empresas que carecen de su propia instalación de respaldo y recuperación, por lo que deben a acudir a un proveedor de servicios para proteger sus equipos. La innovación tecnológica actual se dirige precisamente al desarrollo de estas tecnologías. De ahí su creciente demanda.
Crecimiento sostenido
Hemos hablado de las ventajas de los backup en la nube y de las soluciones en la nube de disaster recovery, dos aspectos complementarios y necesarios en lo que atañe a la seguridad TI. No obstante, el crecimiento de estas tecnologías en el mercado se ha visto obstaculizado por la necesidad de un software específico y una buena conexión a internet, no disponible en regiones de carencia tecnológica como Asia y África.
Las soluciones de copia de seguridad y recuperación ante desastres tienen su aplicación en diversos sectores como el bancario, la educación o el financiero, entre otros muchos, y se espera que la demanda y la reducción del coste de almacenamiento aumente su perspectiva de crecimiento en los próximos años.